El término “observabilidad” en el ámbito de la industria tecnológica, aún es un concepto poco conocido. Así que si ya lo has escuchado pero aún quedan dudas sobre su definición, alcance y beneficios, en este artículo te daremos una breve introducción sobre el tema.
En términos prácticos, la observabilidad es la capacidad de tener una visibilidad completa y en tiempo real del funcionamiento de los sistemas y aplicaciones, lo que permite detectar, diagnosticar e incluso predecir problemas, posibilitando su resolución antes de que afecten negativamente a los usuarios finales. En este artículo comentamos las capacidades que se pueden desarrollar a través de la observabilidad, así como los beneficios que impactarán transversalmente en los resultados de las organizaciones.
Para dar una definición clara al significado de observabilidad, primero se debe comprender qué es un sistema. En términos simples, un sistema es un conjunto de elementos que interactúan entre sí para cumplir metas.
En este contexto, se puede decir que la observabilidad es la evolución del tradicional monitoreo de aplicaciones. Mientras el monitoreo nos permite tomar conocimiento de comportamientos fuera del rango de normalidad esperado sobre el estado de un sistema, la observabilidad vá más allá y nos permite la capacidad de responder a preguntas complejas sobre el estado de un sistema, a través de respuestas accionables claras que ayuden a obtener conclusiones, relacionando toda la telemetría previamente recolectada sobre éste.
Siendo así, desarrollar la capacidad de observabilidad en una organización representa la realización de un proyecto estratégico que va más allá de la elección e implementación de herramientas. Requiere un desarrollo de capacidades de los equipos técnico y operativo y gerencial, para que puedan sacar provecho al impacto - positivo - que se genera en la visibilidad y manejo de la información.
Las 4 capacidades de la observabilidad:
Independiente del nivel de madurez en que se encuentre la organización en relación a este tema, existen 4 capacidades básicas que los equipos técnicos encargados del sistema (ya sea desarrollo, infraestructura, operaciones, DevOps, SRE, calidad o testing) deben dominar para obtener la observabilidad en un sistema:
Instrumentar tecnologías de observabilidad en todos los elementos que conforman el sistema (como agentes APM, agentes para infraestructura, SDKs, etc…) para recolectar información crítica que describe el estado en que se encuentra un sistema, dando como resultado telemetría de tipo “MELT” (métricas, eventos, logs y trazas) lista para ser visualizada.
Monitorear (procesar, relacionar y expresar) la telemetría recolectada para poder analizar, identificar y alertar (si es necesario) indicadores clave al estar en cualquier estado.
Analizar y establecer SLAs (Service Level Agreements) y SLOs (Service Level Objectives) con base en las metas del negocio para poder interpretar la telemetría recolectada y obtener la capacidad de responder preguntas complejas. Por ejemplo, ¿De cuánto fue la pérdida financiera en la última falla del sistema de su ecommerce?
Predecir comportamientos del sistema antes de realizar acciones estratégicas para crear presupuestos comprobables, prevenir comportamientos inesperados, y garantizar cambios de impacto positivo al negocio.
Aunado a estas capacidades, es crítico que las herramientas de observabilidad:
- Reporten datos de un entorno productivo,
- Cuenten con un sistema de alertamiento que reporte en tiempo real, y
- Permitan la retención de la información coleccionada por semanas o meses.
Estas 3 características junto con las 4 capacidades de observabilidad bien desarrolladas nos permiten predecir comportamientos inusuales antes de que sucedan y actuar en su mitigación para evitar daños colaterales que puede sufrir el sistema. Además, estas características y capacidades nos permiten detectar posibles vulnerabilidades cibernéticas, detectar problemas “unicornio” (difíciles de creer), comportamientos atípicos de usuarios finales, fluctuaciones inesperadas en el negocio, etc…
La efectividad de la observabilidad aplicada hacia un sistema depende del nivel de madurez en que se desarrollen estas 4 capacidades.
¿Cuáles son los beneficios de la observabilidad?
Hay 4 beneficios que se resaltan al contar con una estrategia madura de observabilidad:
Reducir a minutos los tiempos de identificación de problemas al tener visibilidad en tiempo real de la telemetría de todos los elementos del sistema.
Proporcionar visibilidad de datos estratégicos para la toma de decisiones gracias a que no solo se colecciona telemetría informática sino del negocio.
Evitar reincidencias al analizar y comprender el comportamiento del sistema con el paso del tiempo.
Optimizar procesos, costos y prioridades al implementar acciones estratégicas en la operación diaria de un sistema.
Permitir a diferentes equipos en la compañía hablar el mismo idioma, al contar con la misma información.
Como se puede percibir, los beneficios de la observabilidad son transversales, y pueden apoyar y aportar al objetivo común de las diferentes áreas de una organización: el resultado positivo en el negocio. Siendo así, ya no queda duda en afirmar que el desarrollo de las capacidades de observabilidad es un tema imperativo en la modernización de la gestión de negocios, desde un punto de vista que engloba lo estratégico, lo operativo y el desarrollo técnico de los equipos.
Conoce más sobre la observabilidad y cómo podría ayudarte en la operación de tu organización agendando una llamada con nosotros. Nos dará mucho gusto hablar contigo y conocer los retos que tienes por alcanzar y encontrar oportunidades dónde te podremos apoyar.